A veces la vida nos trae experiencias inesperadas que nos pillan de improviso, nos desconciertan, nos hacen dudar y la mayor parte de las veces nos conectamos con esas oportunidades desde el sufrimiento. ¿Qué puedo perder?, ¿Qué está en juego?, ¿Qué hago ahora?, ¿Y si me equivoco?
LA VIDA ME HA TUMBADO, ¿QUÉ PUEDO HACER?
Son encrucijadas que requieren de nosotros silencio, serenidad, ecuanimidad para poder elegir desde el corazón. Y esto es lo que buscamos en las sesiones de Registros Akashicos y el coaching espiritual. Apagar la mente, las expectativas, la inercia, los planes y entonces preguntarle al corazón y al alma.
¿Qué necesito en este preciso momento?, ¿Qué permiso tengo que darme para poder hacerlo?
Y seguramente tu respuesta tenga algo que ver con el apego. Nos apegamos al confort, a lo cotidiano, a lo conocido porque nos identificamos con nuestro entorno. Somos lo que hacemos y en parte somos todo lo que nos rodea. La familia, la pareja, las amistades, el trabajo…
LOS REGISTROS AKHASHICOS, TODO LO QUE NOS PUEDE BRINDAR EN UNA SITUACIÓN COMPLICADA
Escuchar al corazón en una sesión de Registros Akashicos es abrir la posibilidad de cambiar, es abrirnos a la posibilidad de poner por delante nuestras necesidades interiores y anhelos del alma a todo aquello que nos rodea. Se trata de ir más allá del plano en el que nos encontramos para encontrar el camino de sanación y crecimiento a través del momento presente.
Abrir los Registros Akashicos es conectar con el amor propio, con la vulnerabilidad y reconocer nuestro miedo. Miedo a cambiar, miedo a crecer porque implica soltar, descubrir y des identificarnos con lo que conocemos abriéndonos a lo desconocido.
Para ello primero debemos identificar QUÉ ES LO QUE DESEO donde algunas herramientas como Registros Akashicos, Tarot Terapéutico o Evolutivo pueden ayudarte y después iniciar un proceso de desarrollo personal como puede ser el coaching, donde cada día vayas integrando cambios en tu rutina, en tu ser que te van a ir acercando a esa REALIDAD DESEADA.
Somos lo que hacemos, no lo que decimos, por lo que cada vez que te pongas manos a la obra con algo estarás reforzando esa parte de ti.
Conecta con tu amor propio. Identifica tu deseo interior. Actúa como si ya lo tuvieras. Genera cambio. Genera movimiento. Y así poco a poco irás acercándote a tu objetivo. ¿Quieres que te ayude en este maravilloso proceso de sanación? ¡Contacta conmigo y empezemos! Soy, Rincón de las luces, tu Coach Espiritual.
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